Repito
Un día lleno de caos, de miedos y de nervios. Una semana importante en el trabajo con una misión concreta que salió mal. Tropecé con la piedra que juré apartar, la del silencio, la de querer poder con todo. Lo encargado era literalmente para ayer. No llegué. Se me escapó el tiempo entre las manos. Siento que una parte de mí lo sabía porque al despertarme en la mañana, escribí en un cuaderno "Ayer soñé con un recuerdo. Es raro soñar una escena que se recuerda y no quitarle ni sumarle nada. Además, no es de mis preferidos" . En esta especie de sueño, me recordé con trece años en primera persona. Transitaba el primer año de la secundaria con un esguince en el tobillo. Debido al impedimento físico, caminaba apoyada en una muleta ortopédica con mangas de plástico blanco. El momento es corto, y dice así: Estoy por salir del colegio junto con el resto de alumnos del secundario. Como bajé lento las escaleras, mis amigos se adelantaron. Me duele el pie, me pesa el brazo, pero sigo el...